Un Hijo Llama la Atención
LOS CONFLICTOS > CONFLICTOS CON LOS HIJOS
- LOS CONFLICTOS -
- CONFLICTOS CON LOS HIJOS -
UN HIJO LLAMA LA ATENCIÓN DE LA PAREJA
Cuando dos personas emprenden la aventura de unirse, formar una pareja y tener hijos, se genera en ellos un sentimiento diferente hacia cada uno de sus descendientes. Este sentimiento viene marcado por el momento que vive la pareja cuando empieza el embarazo, por las necesidades personales o familiares, por el sexo del hijo y por las peculiaridades personales del mismo.
Pero, es muy frecuente que los hijos no estén totalmente de acuerdo con los papeles asignados por los padres, especialmente si estos no han tenido en cuenta la personalidad, la peculiaridad o las necesidades de alguno de ellos.
Cuando un hijo percibe que no está recibiendo suficiente atención por parte de uno o de los dos padres, tanto porque estos no atiendan adecuadamente sus necesidades como porque haya diferencias importantes en el trato hacia los hijos, se pone en marcha en él la necesidad de acaparar la atención de los padres hacia sí mismo para intentar restablecer el equilibrio perdido. Esta percepción de falta de atención puede ser real o imaginada por él, pero en ambas situaciones se pone en marcha el mismo proceso.
Pongamos un ejemplo en el que la pareja tiene inicialmente un hijo varón al que el padre considera su heredero, en segundo lugar otro hijo y en el tercero una hija. Para el padre, el segundo ocuparía el lugar del heredero de repuesto, con un rango e importancia por debajo del primero. Para la madre, el segundo hijo es el que más fácilmente heredará su línea de carácter pero, como es un varón, es más difícil hacerlo directamente de ella y es probable que elija la herencia caracterial de un hombre importante en la familia de la madre como el abuelo o un tío materno.
Pero cuando llega la hija en el tercer lugar, ésta acapara la atención del padre por ser un lugar impar y la única hija y también la de la madre, por ser de su mismo sexo y la pequeña. De esta forma, el segundo se puede quedar descolgado y sentir que los padres, demasiado ocupados con la preferencia que manifiestan por sus otros hijos, no le muestran el interés o la dedicación que sí muestran con los otros hermanos.
En esta situación, es muy fácil que el hijo segundo intente atraer hacia sí la atención de sus padres por los medios que estén a su alcance y que compita con sus hermanos para destacar en algún aspecto que agrade a los padres.
Un hijo llama la atención de la pareja
Este comportamiento le puede llevar a generar situaciones conflictivas y a activar el rechazo por parte del hermano y la hermana, así como el del padre al criticarle y compararle negativamente con su hermano mayor.
Es muy probable que este hijo se vea en la necesidad de huir de un entorno familiar que no le resulta favorable y busque en otros lugares la forma de desarrollar su manera de ser y su personalidad. Si tiene éxito en su aventura, puede volver al entorno familiar a lucirse y a intentar, de nuevo, ocupar un lugar importante en la familia, pero si no lo consigue o los padres no le otorgan ese lugar, se generará un nuevo ciclo de crisis y de enfrentamientos que agravarán cada vez más la situación creada.